A causa de la guerra que asola su país, Faisal Hamdo abandonó Siria en 2014. En Alemania construyó una nueva vida y, a día de hoy, trabaja con un contrato indefinido como fisioterapeuta en la clínica universitaria de Hamburg-Eppendorf.
Mi historia
„Para mí, la homologación supone formar parte de la sociedad para contribuir al futuro del país.“
En su país de origen, Siria, Faisal Hamdo cursó la carrera de Fisioterapia en la Universidad de Alepo y obtuvo su diplomatura. Después, trabajó dos años como fisioterapeuta en una clínica y en un equipo deportivo de niños con discapacidades. Pero la guerra cambió la vida de este joven de 28 años de la noche a la mañana. Primero, trabajó como fisioterapeuta voluntario. Pero la situación era más grave cada día, por lo que en junio de 2014 huyó a Alemania. Y en su maleta traía un gran deseo. «Buscaba un futuro seguro en Alemania y esperaba poder trabajar en mi profesión».
Pero el idioma era un obstáculo. Por ello, lo primero que hizo Faisal Hamdo fue apuntarse a un curso de alemán y conseguir el nivel B1. Su futuro profesional también le preocupaba. Unos conocidos le aconsejaron que se pusiera en contacto con la Oficina central de homologaciones de la Diaconía de Hamburgo. Esta oficina de asesoramiento pertenece a la Red IQ de Hamburgo - NOBI. En ella le aconsejaron presentar una solicitud de homologaciónde su profesión ante las autoridades de Sanidad y Protección del Consumidor de Hamburgo. El primer intento fue fallido, ya que no tenía su diploma. Sin embargo, para la evaluación de la profesión de referencia, presentar el diploma es esencial. Tenía que presentar los documentos. Pero ¿cómo iba a conseguirlos dada la situación en Siria? «No podía ni ir a Siria, ni pedirle a ningún familiar que solicitara lo expedientes en la Universidad de Alepo. Pero tuve suerte en la desgracia, y al final conseguí recibir los documentos». El padre de una chica que Faisal Hamdo trató gratuitamente antes de que empezara la guerra en el centro de fisioterapia le consiguió los importantes documentos. Así es como logró presentar la solicitud al segundo intento y, el mismo mes, obtuvo la resolución.
Hamdo pudo compensar las diferencias fundamentales que contenía el mismo, en relación con la formación profesional alemana, con unas prácticas de adaptación. Como el requisito era un nivel B2 de alemán, primero aprobó un curso de idioma especializado en sanidad en el proyecto IQ de la empresa passage gGmbH. Mientras tanto, se aseguró una plaza en la academia de formación UKE del hospital universitario de Hamburg-Eppendorf para una cualificación de adaptación para profesiones sanitarias de seis meses. Este proyecto IQ combina elementos prácticos y teóricos. Cuatro días a la semana, Faisal Hamdo en el equipo del hospital universitario; paralelamente, recibía instrucciones y clases clínicas. Normalmente, había un día reservado para los talleres. «Al principio actué con timidez, pero tuve mentores y me asesoraron muy bien. Poco a poco, pude ir participando en los tratamientos y, al final de mis prácticas, los realizaba yo mismo». Cuando terminó, a finales de 2015, demostró con éxito sus conocimientos técnicos y obtuvo la homologacióntotal de su profesión. Durante las prácticas de adaptación, Hamdo no solo obtuvo una beca mensual, sino que, además, el programa de becas del Ayuntamiento de Hamburgo le financió las tasas del procedimiento, el curso de alemán y los gastos de transporte.
Este joven de 28 años encontró empleo muy pronto. «Durante el curso de alemán para profesiones sanitarias, hice unas prácticas en una clínica de fisioterapia. Tras obtener la homologación, me contrataron como especialista. En marzo de 2016, empecé a trabajar en el hospital universitario». Faisal Hamdo trabaja en este hospital como fisioterapeuta en la unidad de cuidados intensivos y está muy contento. «Ahora tengo un contrato indefinido y, por tanto, la vida asegurada. Gracias a la homologación, tengo la sensación de pertenecer a la sociedad y de contribuir al futuro de este país».
Faisal Hamdo ha narrado sus experiencias en un libro. En Lejos de Alepo: cómo vivo en Alemania como sirio no solo relata los obstáculos que ha tenido que superar, sino que también habla de la vida en su país de origen.
La entrevista con Faisal Hamdo se produjo en enero de 2018. Durante el procedimiento de homologación, obtuvo el asesoramiento y la ayuda de las autoridades de Sanidad y Protección del Consumidor de Hamburgo y de distintos proyectos pertenecientes a la Red IQ de Hamburgo - NIBI: la Oficina central de homologaciones de la Diaconía de Hamburgo, la empresa passage gGmbH para el curso de alemán y la academia de formación UKE del hospital universitario de Hamburg-Eppendorf durante la cualificación de adaptación.
Mi procedimiento en resumen
- Tras concluir sus estudios de fisioterapia, Faisal Hamdo trabaja dos años como fisioterapeuta en una clínica y en una asociación para niños discapacitados en Siria.
- En junio de 2014, huye a Alemania de la guerra de su país. Aquí aprende alemán en un curso de idioma.
- Faisal Hamdo acude a la Oficina de Asesoramiento de IQ en Hamburgo y presenta una solicitud de homologación. Pero para la evaluación de equivalencia le faltan documentos necesarios.
- En un segundo intento, consigue la resolución de homologación. Posteriormente, Faisal Hamdo debe compensar las diferencias fundamentales con la formación alemana en unas prácticas de adaptación.
- Tras realizar un curso de alemán para profesiones sanitarias, una medida compensatoria y dos prácticas, Faisal Hamdo consigue la homologación total. Actualmente, trabaja como fisioterapeuta en el hospital universitario de Hamburgo-Eppendorf.
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